Lost ha cambiado la forma de ver las series en muchas formas pero una de las que más me impactó fue la de que, por primera vez, vimos a personajes hablar en un idioma que no era el inglés en el prime time de EEUU. Con los primeros que experimentamos esta gratificante sensación fueron Jin y Sun. Sí, hoy le toca el turno a “los coreanos”.Nunca he sido una apasionada de los capítulos de “los coreanos” pero esta semana les han dado una buena historia aunque, desgraciadamente, aún nos toca esperar para el reencuentro más ansiado de Lost ¿tendrán su reencuentro o morirán en el intento? Mientras lo averiguamos analicemos que ha pasado hoy:
En la realidad alternativa desconcertante vemos que los Kwon no están casados. No me sorprende ya que me parece una pista para tener en cuenta que el candidato es Jin y no Sun la cual se apellida Paik. El padre de Sun es un verdadero hijo de puta que quería matar al coreano delante de su hija y, encima, le hacía pagar a él mismo a su propio verdugo. Después de ver el capi de Sayid era fácil adivinar que el verdugo era Keamy que ha vuelto en otro espectacular cameo junto con el gran Mikhail ( la 3ª temporada fue espectacular ¿¿lo he dicho ya??) que sin el parche no es lo mismo pero se agradece verle.
Sun resulta herida y además confiesa que está embarazada ojalá esto sirva para ver de vuelta a mi añorada Juliet Burke como ginecóloga, por cierto, ¿entiendo que el bebé no es de Jin? Es que la escena en que se lo montan me ha dado entender que era la primera vez que eso ocurría,no? Genial Sun en su escena de seducción, en Lost no suelen abusar de este tipo de escenas pero la coreana se ha marcado un buen tanto y Jin ha demostrado que él tiene el mejor cuerpo masculino (benditos abdominales) y no el sobrevalorado pelo Pantene Sawyer. Sigo sin entender la realidad alternativa pero si que da claro que su destino estaba más o menos escrito: a Mikhail le dispara Sun en el ojo, Jin acaba matando, el padre de Sun sigue siendo un cabrón, etc.
Recuperamos a un desaparecido Jin Kwon que no se fía de un pelo de ese Flocke humeante que gobierna la Isla, el coreano aprovecha la mínima oportunidad en que Flocke se aleja para intentar ir a por su mujer pero en esta maldita Isla nada es tan fácil y el equipo de Widmore ataca con dardos ¿anestesiantes? y se lo llevan. Lo primero que se me ha pasado por la cabeza es que no entendía porqué Mr. Widemore quiere a Jin aunque hay respuesta: sus 3 años en Dharmaville le hacen conocedor del lugar en que están ubicadas las bolsas electromagnéticas ya que él mismo firmo algunos de los planos. Bien, bien, bien parece que los guionistas no se han olvidado del todo de la parte científica de la historia y Jin ayudará en ella así como la persona que tienen encerrada, el famoso paquete que muchos adivinamos correctamente.. pero mejor lo dejamos para el final. Seguimos con Jin porqué hoy el coreano casi me emociona cuando Widmore le da la cámara de fotos con imágenes de su hija Ji Yeon, miedo me da que jamás llegue a conocerla.
Por otro lado tenemos a Sun (mi favorita de la pareja) que sigue en la línea de su marido de querer reencontrarse con él ante todo. Ella está cansada de ir de aquí para allá y de seguir ordenes de todo el mundo así que su reacción, clavando el cuchillo o el pedazo de monólogo en coreano que le mete a Richard Alpert, me parecen más que justificadas. Sun regresa a ese huerto, a uno de los grandes escenarios de la serie, y se le aparece Flocke con intención de captarla para ejecutar su plan pero la coreana, al igual que su marido, no le cree y se escapa pero un trompazo contra un árbol la deja inconsciente provocándole una afasia transitoria. Demuestra ser lista y sabe distinguir en quién confía y en quién no aunque entiendo que su única motivación sea salir de la Isla pero algo me dice que jamás lo conseguirá. Llegados a este punto de la serie creo que todos los que regresaron lo hicieron para no volver y sigo pensando que morirán todos,quizás sólo se salve Jack. Hablando del médico, ha sido preciosa la escena entre él y Sun pero fijaros en dos detalles: tanto Flocke como Jack le tienden la mano aunque ella sólo se la da a un Jack cada día más Jacobiano y, segundo detalle, Jack le dice que le promete que se irán de la Isla pero él no se incluye. Cada vez es más obvio que Jack ha encontrado su destino y destila confianza, se acabaron los tiempos de querer arreglarlo todo del médico obstinado.
Entre tanto Flocke se va a ver a Widmore a la Hydra en un cara a cara entre vallas repelentes de humo de por medio. Dos rivales y sólo uno va a ganar, el señor Widmore parece muy seguro pero Flocke también y, lo que está claro, es que está guerra no es de disparos ni de bombas sino de saber mover muy bien sus fichas y el dueño del submarino tiene un as en la manga: Desmond David Hume. Sí, el escocés borracho es el famoso paquete y lo descubrimos al finalizar el capítulo a través de los ojos zombies de Sayid que le espían desde el agua. Helada me he quedado, y no por ver a Desmond ya que me lo esperaba, sino por la mirada sin alma de quién un día fue mi personaje favorito. Que corra el reloj necesito saber porqué el escocés es la clave de todo este embrollo y porque las reglas no se aplican a su persona, exigo capítulo de Desmond ya.
Apuntes:
- Nunca entenderé que la mejor actriz del cast, Yunjin Kim, tenga uno de los papeles más secundarios de la serie.
- Keamy le dice a Jin que “hay personas que no están destinadas a estar juntas” ¿nos lo tenemos que tomar como una pista de que no se reencuentran? Demasiado cruel
- Flocke está utilizando a Kate para que esta le sirva para convencer a los tres que faltan o, dicho de otro modo, para convencer a Jack y por extensión a Sun y Hurley.
- Richard se ha puesto las pilas y ya tiene un plan, gracias Hurley.
- Hurley y Jack son los dos grandes nombres finales, sí Jacob los ha elegido por alguna razón.
- Sayid me da un miedo atroz, no sé, esa mirada hacía al gran Desmond me preocupa. Por favor, zombie, si aún queda algo de Sayid en ti recuerda tus tiempos de carguero y no le hagas daño al escocés errante.
